Poza Rica, Ver.- Según Azuara, la decisión no solo fue una burla hacia su persona, sino que también refleja una actitud despectiva hacia todas las mujeres que formaron parte de su equipo dentro del partido.
En una declaración contundente, Azuara acusó a Movimiento Ciudadano de violentar los derechos políticos de las mujeres, señalando que en el partido no se les brinda una participación abierta ni se les permite acceder a puestos importantes en la administración pública. “Este no es solo un problema personal, es una muestra de la falta de compromiso de la dirigencia estatal encabezada por Luis Carbonell, que sigue perpetuando la exclusión de las mujeres en roles de poder”, comentó.
Azuara, quien había comenzado su precandidatura con el propósito de impulsar una administración más inclusiva y equitativa, indicó que se mantendrán a la espera de una disculpa pública por parte de la dirigencia nacional del partido, que, según ella, debe rendir cuentas y dar la cara ante las acciones tomadas por la estructura estatal.
“Las mujeres no vamos a seguir permitiendo que nos ninguneen”, concluyó.
Este incidente pone en evidencia una creciente preocupación sobre la equidad de género en los espacios de toma de decisiones dentro de los partidos políticos, no solo a nivel local, sino también en el ámbito nacional.
La reacción de la dirigencia de Movimiento Ciudadano será clave para determinar si este tipo de prácticas serán corregidas o si se seguirá perpetuando la exclusión de las mujeres en la política.