Poza Rica, Ver.- El alcalde Fernando Luis Remes Garza ha hecho un llamado a los empleados sindicalizados, pidiendo clemencia y solicitando que se les perdone un año de aumento salarial y otras prestaciones correspondientes al presente ejercicio contractual.
Esta solicitud ha generado inquietud y descontento entre los trabajadores municipales, quienes consideran que han cumplido con sus obligaciones y merecen recibir lo que les corresponde.
La situación se complica tras las afirmaciones del alcalde de que, junto a la tesorera Luz Karina Hernández Andrés, se han “despilfarrado” los recursos de las arcas municipales, lo que ha llevado a la administración a enfrentar serias dificultades financieras.
Remes Garza argumenta que la falta de fondos le impide cumplir con los compromisos salariales establecidos. Los empleados sindicalizados han manifestado su descontento, demandando transparencia en la gestión de los recursos y exigiendo una solución que respete sus derechos laborales.
Hasta la fecha, el alcalde se ha negado a llevar a cabo la revisión contractual correspondiente al año 2024, lo que ha intensificado las tensiones. Bajo asesoría del jefe del departamento jurídico, Daniel Anaya Pazzi, la administración supuso que los empleados aceptarían esta situación, lo que ha resultado en un rechazo contundente por parte de los trabajadores.
Para este lunes, se ha convocado a una manifestación pacífica durante el acto cívico, además de que se acordó realizar un emplazamiento a huelga. Los empleados exigen que el alcalde autorice el aumento salarial, así como el pago retroactivo correspondiente al presente año, incluyendo aguinaldos y otras prestaciones.
La comunidad se mantiene atenta a los acontecimientos, ya que el resultado de estas acciones podría tener un impacto significativo en la estabilidad laboral del municipio.
