Poza Rica, Ver.- La administración del presidente municipal de Poza Rica, Fernando “El Pulpo” Remes, ha sido objeto de crecientes denuncias por presuntas irregularidades en el manejo de recursos públicos, pero uno de los casos que ha causado mayor revuelo es el que involucra al Oficial Mayor, Marco Tulio Rivera Domínguez.
En su rol, Rivera Domínguez ha sido señalado por empleados municipales y proveedores de estar al frente de una serie de negocios turbios que incluyen el manejo irregular de gasolina y diésel, así como la falta de transparencia en la gestión de recursos públicos.
Durante los tres años que lleva al frente de la Oficialía Mayor, Rivera Domínguez ha sido acusado de manejar contratos de manera opaca y de beneficiar a ciertos proveedores a cambio de favores personales.
Entre las acusaciones más graves, se encuentra el presunto negocio ilícito relacionado con el suministro de combustible para las unidades oficiales del ayuntamiento. Según fuentes internas del propio gobierno municipal, Rivera Domínguez habría vendido hasta vales de gasolina y diésel que, en teoría, deberían ser utilizados exclusivamente para los vehículos oficiales de la administración, pero que aparentemente han sido comercializados para su beneficio personal.
La magnitud de estas acusaciones ha generado un malestar creciente dentro del Ayuntamiento, donde varios empleados han expresado su indignación ante el manejo opaco de los recursos. La corrupción en el suministro de combustible no solo ha afectado la eficiencia de las operaciones municipales, sino que también ha tenido repercusiones económicas graves, dejando al gobierno municipal con adeudos millonarios con los proveedores de combustible.
La falta de claridad en los contratos y la presunta manipulación de los mismos, han contribuido al creciente descontento en la administración de “El Pulpo” Remes. Las irregularidades en el manejo de los recursos públicos no son nuevas, pero la situación con el Oficial Mayor ha puesto en evidencia una red de corrupción que, según fuentes cercanas al gobierno municipal, ha sido tolerada por el propio presidente municipal, lo que genera una atmósfera de impunidad que ha afectado gravemente la imagen del gobierno local.
A pesar de los serios señalamientos, hasta la fecha no ha habido acciones contundentes que investiguen a fondo las denuncias contra Marco Tulio Rivera Domínguez. La falta de transparencia y la evidente protección hacia figuras clave del gobierno municipal, como Rivera Domínguez, han dejado en entredicho el compromiso de la administración de Fernando Remes con el combate a la corrupción.
Con el futuro político del presidente municipal y de su equipo de trabajo en peligro, la ciudadanía de Poza Rica se pregunta si alguna vez se llevará a cabo una investigación seria sobre estas acusaciones o si, por el contrario, la “mafia” de corrupción que ha imperado en el municipio continuará sin ser cuestionada.
