Poza Rica, Ver.- Mientras la atención pública se desvía hacia eventos sociales de gran envergadura, como la boda millonaria del hijo del alcalde Fernando “El Pulpo” Remes, Poza Rica enfrenta una situación de emergencia en términos de infraestructura urbana.
Los pozarricenses que contribuyen con sus impuestos, se ven ahora obligados a lidiar con una ciudad sumida en el caos. Socavones, baches y rejillas en mal estado se han convertido en trampas mortales tanto para automovilistas como para peatones.
Las calles de Poza Rica se encuentran llenas de hoyos y daños visibles, afectando la seguridad y movilidad de la población. Esta crítica situación es el resultado de la falta de mantenimiento adecuado y la negligencia tanto de la CAEV como de particulares que rompen el pavimento para realizar reparaciones de líneas de agua y redes de drenaje.
Los ciudadanos han expresado su frustración ante la inacción de las autoridades, que no han puesto freno a esta problemática. “Las calles están intransitables, no hay solución a la vista, y todo sigue empeorando. Los responsables no toman cartas en el asunto”, señalan los residentes de diferentes colonias.
Mientras tanto, el alcalde Fernando Remes Garza sigue siendo señalado por su falta de liderazgo y por el desvío de recursos municipales. De acuerdo con diversas denuncias, grandes sumas de dinero que podrían haberse destinado a mejorar la infraestructura de la ciudad han sido presuntamente mal utilizadas, lo que agrava aún más la situación.
Poza Rica enfrenta una crisis de infraestructura grave, donde el desorden y la falta de gestión adecuada por parte de las autoridades están perjudicando a la población. La ciudadanía exige respuestas inmediatas, ya que el daño en las calles y las continuas amenazas de accidentes son solo algunos de los problemas que enfrentan diariamente.
