Poza Rica, Ver.- Empresarios constructores de la región han alzado la voz para denunciar prácticas corruptas en el ámbito de las obras públicas del municipio, bajo la dirección de Sergio Assaleih y con el aparente aval del alcalde Fernando Luis Remes Garza.
Aunque el ejercicio fiscal correspondiente a 2024 aún no concluye, se ha revelado que Assaleih ya está negociando contratos para el 2025, lo que ha generado un clima de inquietud y desconfianza entre los constructores locales.
Bajo la condición de anonimato, los empresarios han expuesto que el director de obras públicas les ha propuesto un “moche” del 15 por ciento sobre el valor de los contratos, argumentando que esta práctica les garantizaría el acceso a contratos de manera directa.
Estas acusaciones sugieren que esta forma de enmascarar la corrupción se ha practicado desde el inicio de la actual administración, generando ingresos millonarios para Assaleih y el alcalde.
“Estamos en el último año del gobierno y ya están negociando todos los contratos de obras. Además, nos están pidiendo el 15 por ciento por adelantado”, comentaron los constructores.
Esta situación pone de manifiesto un patrón preocupante de corrupción que parece estar enraizado en áreas estratégicas como obras públicas, donde los intereses económicos de unos pocos parecen prevalecer sobre el bienestar de la comunidad.
Lo anterior requiere de una investigación exhaustiva sobre las prácticas de la administración municipal. La corrupción en el gobierno local, según los denunciantes, no solo afecta a los constructores, sino que también perjudica a la ciudadanía, que se ve privada de obras de calidad y de un manejo adecuado de los recursos públicos.
Esta situación podría tener repercusiones significativas en la imagen del gobierno municipal y en la confianza de los ciudadanos hacia sus autoridades. La situación sigue en desarrollo y se espera que más voces se sumen a las denuncias contra estas añejas prácticas.