Poza Rica, Ver.- Mientras que la violencia sigue de manifiesto en Poza Rica, el alcalde Fernando Remes Garza, solo piensa en deleitarse y disfrutar de las mieles del poder, afirmando ante medios estatales que en Poza Rica hay paz y tranquilidad y “no pasa nada”.
Desde el inicio de gobierno de Fernando Remes Garza, las ejecuciones, cuerpos mutilados, robos, secuestros y otros delitos aumentaron en más del 80 por ciento, según cifras de organismos observadores.
Ahora, hasta un presunto atentado con un edificio ubicado en la colonia 27 de septiembre, el cual fue quemado durante este viernes se registró en la ciudad lo que ha generado un ambiente de temor entre toda la población pozarricense.
En vísperas de la celebración de la expropiación petrolera, persiste la inseguridad en la ciudad y pese al refuerzo de la seguridad por parte de las fuerzas armadas, no han logrado abatir los hechos que generan el terror y miedo en el municipio.
Recientemente también aparecieron mantas con amenazas en contra de lideres petroleros de la Sección 30, lo que causa preocupación entre los diversos sectores de la sociedad.