Poza Rica, Ver.- La “mafia” del poder que ahora prevalece en los gobiernos de Morena y la 4T, han llegado a los extremos como el caso de Poza Rica, donde el presidente municipal Fernando Luis Remes Garza, ha creado una red de presunta corrupción para hacer negocios millonarios con la obra pública.
Con la obra de más de 16 millones de pesos que costará la ciclovía, ha salido a relucir la forma en que opera la red de tráfico de influencias desde el interior del gobierno municipal en la cual, los cabecillas serían el alcalde Fernando Remes Garza y la sindico Lizeth Guerra Méndez.
Y sujetos como Dagoberto Martínez Aguilera, director de contabilidades gubernamental, y esbirro de la tesorera Luz Karina Hernández Andrés.
Dicho sujeto estaría operando para beneficiar a constructores como el caso de Adrián Ulises Hernández Falcón, a quien de manera directa le asignaron el contrato para realizar la obra de la ciclovía.
Este último a través de su hermano, de nombre Víctor Hernández Falcón, quienes con una constructora “patito” realizan obras en otros municipios como Castillo de Teayo.
Fuentes internas del ayuntamiento dieron a conocer que estos sujetos también realizan las obras que el alcalde Fernando Remes Garza, entrega como “favores” a algunos regidores, quienes reciben en dinero efectivo el 20 por ciento del monto total de la obra.
La corrupción que prevalece a su máximo esplendor en el gobierno de Poza Rica, ya llegó a oídos del presidente de la República, Andrés Manuel López Obrador, por la forma tan vil en que el alcalde Fernando El Pulpo Remes, ha hecho su propio negocio con el presupuesto de más de 600 millones anuales que recibe Poza Rica.