Poza Rica, Ver.- El actual alcalde de Fernando “El pulpo” Remes, ha desatado controversia al intentar allanar el camino para heredar la alcaldía a su hijo, Fernando Remes Tostado.
Esta estrategia, vista por muchos como un intento descarado de perpetuar la corrupción en el gobierno local, ha generado críticas tanto dentro como fuera del partido gobernante Morena y de la llamada 4T.
Una señal clara de este plan de sucesión se manifiesta en la presencia constante de Fernando Remes Tostado en eventos públicos, donde asiste en representación de su padre, el alcalde en funciones.
Este movimiento, interpretado por algunos como el inicio no oficial de la campaña del hijo para suceder a su padre, ha levantado alarmas entre aquellos que buscan un cambio real en la administración municipal.
La preocupación se centra en la posibilidad de que esta transición de poder no represente una ruptura con las prácticas corruptas que han caracterizado al gobierno actual. La sombra de la corrupción, que ha prevalecido durante el mandato del alcalde “el pulpo” Remes, podría extenderse aún más si su hijo continúa su legado político.
Ante estas especulaciones, la ciudadanía y diversos sectores de la sociedad civil han expresado su rechazo a cualquier intento de perpetuar la corrupción en el gobierno local.
Instan a las autoridades correspondientes a garantizar un proceso electoral transparente y democrático, libre de influencias indebidas y en el que prevalezcan los intereses genuinos de la comunidad.
El futuro político de Poza Rica se encuentra en una encrucijada, donde la ciudadanía espera que la sucesión en la alcaldía no sea una continuación de los vicios del pasado, sino el comienzo de una nueva era de transparencia y honestidad en la gestión pública.